Día de los fieles difuntos encuentra cementerios entre abandono, profanación y peligro para visitantes
Medios Panorama | | | 2 mins de lectura 
Es urgente que las autoridades competentes asuman la responsabilidad de garantizar espacios dignos y seguros para quienes buscan honrar la memoria de sus seres queridos.
Virgilio Mercedes
Panorama Fotográfico realizó un recorrido por los principales camposantos del Gran Santo Domingo y zonas aledañas, con motivo de la conmemoración del Día de los Fieles Difuntos el próximo 2 de noviembre. Lo encontrado en estos espacios fue preocupante, doloroso y, en muchos casos, alarmante.
En el cementerio de Los Minas Viejo (San Vicente de Paúl), los nichos y tumbas son usados como moradas improvisadas, espacios de descanso e incluso lugares para realizar necesidades humanas. Se observan sepulturas en total abandono, otras saqueadas, cruces y lápidas esparcidas, además de la falta de espacio que obliga a caminar sobre otras tumbas.
En el Cementerio Cristo Salvador, la maleza cubre gran parte del terreno, lo que dificulta la localización de las tumbas. Peor aún, muchas sepulturas en los bordes presentan varillas oxidadas que, ocultas por la hierba, representan un peligro mortal para familiares que, pudieran tropezar y caer sobre ellas. Situaciones similares se repiten en San Luis y La Caleta 2, donde la falta de espacio y el abandono son evidentes.
En los cementerios de la avenida Independencia, Máximo Gómez y Cristo Rey, el panorama no es distinto: destrucción de nichos, profanación de tumbas, hacinamiento y pasillos tan estrechos que hacen casi imposible el tránsito de los visitantes.
El Cristo Redentor, considerado uno de los más grande del país, ofrece un contraste marcado. Mientras que en su interior se levantan majestuosas bóvedas y suntuosos nichos, en su periferia la realidad es opuesta: maleza, descuido y falta de espacio que convierten la búsqueda de una tumba en un verdadero calvario.
El cementerio de Los Alcarrizos apenas puede ser catalogado como tal. Allí, vacas, animales, cruces y sepulturas conviven en una mezcla caótica entre vivos y muertos, dando la impresión de ser más una finca que un campo santo.
En los cementerios municipales de San Cristóbal, Yaguate y Najayo, al sur del país, la situación no mejora. Tumbas y nichos abandonados, profanados y amontonados evidencian el olvido total.
Este recorrido deja al descubierto una realidad triste y peligrosa: los cementerios del Gran Santo Domingo y otras provincias carecen de mantenimiento, seguridad y regulación.
Cementerio Cristo Redentor
Cementerio de Najayo
Cementerio de Yaguate
Cementerio de San Cristóbal
Cementerio La Caleta
Cementerio de San Luis
Cementerio de Los Minas Viejo
Cementerio de Los Alcarrizos
Cementerio de la Av. Máximo Gómez
Cementerio de la Av. Independencia
Cementerio de Cristo Rey
Cementerio Cristo Salvador
