Como si se tratase de una dinastía, la familia Peña ha manejado el Ayuntamiento de Santo Domingo Oeste en 19 de los 24 años desde su creación, siendo Francisco y su hijo Francis las principales caras al frente del edil desde el año 2002 cuando la capital se partió aún más políticamente.

El patriarca ganó las elecciones municipales en 2002 y 2006 para ceder a su hijo la candidatura, mientras él aspiraba a senador de toda la provincia en 2010, posición que perdió ante Cristina Lizardo. Con la particularidad de una gestión de seis años, Francis dirigió la demarcación en medio de críticas, reclamos sociales y hasta señalamientos de corrupción, que todavía hoy permanecen cuando supuestamente se mantiene en la alcaldía desde las sombras.

Su padre reclamó el trono en 2016, aunque lo perdió en 2020 (todavía aspirando por el PRD) ante un José Andújar del PRM, a quien le ganó en las internas de este último partido en 2024 para volver a alzarse con la candidatura y, posteriormente, con la victoria para ostentar por cuatro años más el cargo de alcalde de Santo Domingo Oeste.

Más que ser esto un desglose de la vida política de Los Peña y, en especial del padre, es más bien el contexto para presentar una serie de denuncias que hacen dirigentes comunitarios, presidentes de juntas de vecinos y munícipes, en general, sobre las gestiones que han administrado esa demarcación, principalmente la actual.
Presupuesto participativo
En 2007, se promulgó la Ley 176 sobre el Distrito Nacional y los municipios que instituyó el Presupuesto Participativo Municipal, con el que se busca incluir a los ciudadanos en la “discusión, elaboración y seguimiento del presupuesto del municipio”, especialmente en lo concerniente a gastos de capital y de inversión.

Tuvimos acceso al Presupuesto Participativo de 2025 de Santo Domingo Oeste para constatar la ejecución del mismo a través de visitas a los lugares donde debieron estar las obras presupuestadas, pero, en octubre, incluso ninguna ha iniciado.

Tal es el caso de la calle principal del sector Juan Guzmán, para la cual se destinó un monto de 5,000,000 de pesos y como evidencian las imágenes están sin aceras, con lodo y sin visos de que su reparación iniciará próximamente.

“De 2025 nosotros no tenemos ni una sola obra en ninguna de esas ejecuciones que ellos solamente las tienen en el papel. Aquí no existe una obra ejecutada. Puede ser que haya remiendos de obras de 2023 y 2024, pero de 2025 no tenemos obras”, reveló Yanely Metivier, líder comunitaria del Movimiento Unidos por una voz de Santo Domingo Oeste.

Pero el sector Juan Guzmán no es el único que tiene estas particularidades en el municipio. También en Hato Nuevo el presupuesto destina una partida de 8.7 millones de pesos para la construcción de una cancha, seis millones para la remodelación del parque y otros 10 millones para la construcción del cementerio. Ninguna de esas obras ha sido iniciada.
“El cementerio aquí tiene más de 100 años. ¿Dónde está el cementerio nuevo?”, cuestiona Julio Matías, presidente de la Junta de Vecinos Buenas Noches, Hato Nuevo.

Ante esas obras presupuestadas y no ejecutadas surgen las preguntas: ¿A dónde han ido los recursos destinados originalmente para su construcción? Si se va a aprobar un presupuesto para 2026, ¿qué pasará con las obras no construidas y los fondos que se destinaron a las mismas?
“Se ha exigido al alcalde Francisco Peña la construcción de este parque de Santiago Apóstol. Todavía a la fecha solo se pone en presupuesto. Se han colocado varias partidas en presupuestos anteriores de dos millones de pesos, tres millones, pero en esta ocasión tiene cinco millones de pesos, y tampoco se ha dado un primer picazo”, revela Marcos Hernández, presidente de la junta de vecinos de Zona de Expansión.

Así como estas obras en estos sectores, existen otras en todo Santo Domingo Oeste con montos, en algunos casos, de hasta 18 millones de pesos sin ningún tipo de ejecución.
Los arbitrios
Otro documento al que tuvimos acceso fue una comunicación que envió el regidor Jorge Luis Pérez a la Alcaldía conteniendo un levantamiento sobre supuestas irregularidades en el pago de arbitrios, especialmente por parte de las cabañas del municipio.
“Se detectó que en nueve casos de cabañas existe dualidad en los pagos, lo que indica que los arbitrios correspondientes no están ingresando en su totalidad a las cuentas oficiales del Ayuntamiento”, precisa el comunicado firmado por el concejal.

Esta dualidad busca reportar menos habitaciones que las que realmente tienen estos establecimientos, lo que representa una pérdida “sustancial” para la recaudación del Ayuntamiento.
“La dualidad en el pago de arbitrios sugiere la posible existencia de desvío de fondos o de una red de cobros informales, lo cual debe ser investigado con carácter de urgencia”, indica el propio regidor en el comunicado.

La comunicación tiene fecha del 26 de mayo de este año y de acuerdo a una fuente dentro de la sala capitular, esta no ha sido respondida, ni el problema corregido. Incluso va más allá al revelar que esa estructura de cobros ilegales es operada desde las más altas esferas del cabildo.
Ni las prestaciones quieren pagar
Un grupo de exempleados de la Alcaldía aseguran que luego de haber prestado servicio al cabildo y ser desvinculados, Francisco Peña directamente les dijo que no les pagaría sus prestaciones laborales, algo que de acuerdo a uno de los afectados sucedería en diciembre próximo con un grupo de envejecientes a los cuales “quiere cancelar sin liquidación”.
“Yo tengo trabajando con él desde que él inició en la Alcaldía. Le dije que necesitaba las prestaciones laborales que me corresponden y me dijo que él no le va a dar prestaciones laborales a nadie. A todas las personas mayores él los tiene hasta diciembre y dijo que no les va a dar las prestaciones laborales que le corresponden”, indicó uno de los denunciantes que prefirió el anonimato.

Asimismo, aseveró que hay muchos envejecientes que estaban pensionados y después “les quitaron la pensioncita”.
“Hay otro grupo que pidió pensión, pero no se hizo nada. Las prestaciones las solicitaron todos y no se les dio. Lo único que pudimos conseguir era lo poco que teníamos en la AFP”, declaró.
De acuerdo a la fuente, el alcalde de Santo Domingo Oeste no dio ninguna razón para negarse a otorgar lo que por derecho les corresponde a los desvinculados. “Me canceló hace dos años y nunca me dieron un centavo”, concluyó.
Nepotismo
Cuando Francis Peña era Alcalde entre 2010 y 2016 nombró a su padre como asesor de su gestión para luego Francisco Peña volver al cargo tras las elecciones de ese último año. A leguas una práctica nepotista que continúa hoy a mayor escala, de acuerdo a fuentes a las que tuvimos acceso y que se rehusaron a ser identificadas.

“Esa alcaldía la manejan Francisco Peña y sus hijos. Eso ahí es un mercado persa”, nos indicó la fuente al precisar que además existe un problema político entre los concejales que tampoco respetan al presidente del concejo de regidores por pugnas internas dentro del Partido Revolucionario Moderno (PRM), en las que incluso el presidente José Ignacio Paliza ha debido intervenir.
Infuncional
Sobre los sucesos denunciados y las irregularidades presentadas en documentos, todavía organismos como la Cámara de Cuentas no ha hecho pública alguna auditoría que confirme las situaciones que ocurren en ese cabildo y que puedan someter a la justicia, en caso de ser necesario, a quien las haya cometido.
A pesar de que los munícipes han iniciado el proceso de involucramiento en las actividades en las que la ley les otorga el derecho, se está lejos de cumplir con lo establecido por norma al momento de distribuir y ejecutar un presupuesto.

Francis fue fuertemente criticado por su gestión, al tiempo que también fue acusado de corrupción y malversación de fondos públicos, hasta la no recogida de basura y olvido completo del cuidado del municipio.
A mediados de su gestión, Francis nombró a su padre como asesor del ayuntamiento.
A mediados de su gestión, ese rumor cobró razón cuando Francisco anunció que volvería a ser el candidato a la alcaldía de Santo Domingo Oeste, mientras que su hijo aspiraría a una diputación por esa misma demarcación, tras llegar a un acuerdo tanto con Francis como con las dirigencias del PRD y el PLD, quienes irían aliados por primera vez en el 2016.

